La primera prueba

Andamos muchósimo tiempo jhasta llegar de nuevo a la ciudad, esta vez en descenso de la montaña. Ella me había estado agarrando de la mano durante muchísimo tiempo, durante el cual yo estaba muy muy averginzado, ya siendo la mitad del tramo me soltó la mano, y con ella, yo también me solté y empezé a hablar un poco más. El pequeño Less no se separaba de Blochi, menudo tio...apuesto a que aquella pequeña Pokémon era de su agrado.

Porfin llegamos a la ciudad, me estube fijando durante mucho tiempo en el camino, ella seguía llevando mi capa, me gustaba que la llevase, a mi no me importaba sorportar la rasca, devía ser duro, me lo exigia a mi mismo. Ella me condució por muchas calles de la ciudad, incluso parecía de allí, tenía buen manejo de aquellas calles. Al final llegamos a nuestro destino, un enormísimo puente nos separaba de una roca enorme, enorme de verdad, con una escalera en espiral y una puerta¿una roca con una puerta?¿con escaleras?¿que era aquello? Me quité, asombrado, la mano de Jen de la boca.

¿Que...es este lugar? - dije anonadado.

Escuché atentamente las palabras de Jen, parecía ser que el sitio ante el que estábamos era...la Unión Ranger. Era un sitio impresionante de verdad, mis manos temblaban de pura impresión, aun sinb saber que era aquel lugar. Una enorme ola chocó contra el "eficio" de piedra, provocando que un momtón de agua salpicara, de verdad me quede anonadado con la visión de aquella "super-estructura".

Enmedio de mi impresión traté de oir las palabras de Jen de lo que en realidad era aquel edificio, mientras lo decía, la miraba, parecía muy entusiasmada de decirmelo, además de un leve sentimiento de nervios mientras me hablaba. Cuando terminé de escucharla me quedé entusiasmado¿de verdad existia algo tan genial como aquello? Proteger la naturaleza y los Pokémon, además viajar y pudiendo subvencionarme a mi mismo ya que ganaría dinero con aquello sin tener que desempeñar ningún otro trabajo aparte, era un sueño.

Un Ranger...¡son geniales!Siempre quise proteger la naturaleza y a los Pokémon, además siempre soñé con viajar por todo el mundo y ver tantas cosas...¡es ideal para mi! - dije mientras la miraba muy entusiasmado.

Ebtonces fue cuando me fijé en él...Lessiandon....Aquel pequeño Pokémon parecía que se estaba pasando un poco con Blochi, ¿la estaría molestando? Less no paraba de restregarse contra Blochi, daba una vuelta alrededor de ella, rozando su cuerpo contra el de Blochi. Cuando llegó a su cara volvió a lamerla, esta vez en los labios, parecía un beso...pero aquello era ridículo, no creía que los Pokémon tuviesen la misma concepción de "beso" que los humanos, era imposible que le estuviese intentando...tirar los tejos.

¿Entramos? ¡Vamos! - le dije entusiasmado mientras hacía el amago de andar hacia alante.

Estaba emocionado, muy activo, en mí se había encendido esa chispa que poco después despertaría una llama muy muy ardiente. Estaba de pie, mirando a Jen, de pronto ella pareció un poco...inestable, parecía que fuese a hacer algo, y justamente, así fue como ocurrió. Jen pegó un gran grito de libertad animandome a que fuesemos hacia aquel enorme e imoponente edificio. Ella salo corriendo poco tiempo después, con todas sus energías, y Blochi la siguió, yo empecé a correr, pero bastante más lento, hasta que...

"¡¡Vamos Edd!!¡¡Vas a ser Ranger!! ¡¡Vamos a viajar por esta región!! ¡¡Va a ser alucinante!! "

Esas frases de ánimo con tanto ímpetu en ellas hizo que las chispas que había en mi interior acabasen estallando en esa enormísima llama eufórica que hacía que me descontrolase sin ser yo mismo responsable de mis propios actos, una emoción absusiva, En ese momento fruncí el ceño y sonreí con mucha decisión, me pusé en posición y empecé a correr a toda velocidad. El viento rozaba en mi cara, la sangre me hervía y el agua que chocaba contra el punete me mojaba haciendo que sintiese una emoción única.

¡VROOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOEEEEEEE! - grité con una pasión insuperable.

¡SHIEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEELLLL! - para mi sorpresa Lessiandon me imitó, corriendo a mi lado también con todas sus energías.

Al fin llegamos ambos a la puerta del enorme edificio, era sumamente gigante, enorme, de lo más grande que había visto en mi vida, era...imponente. En frente teníua una puerta de cristal que se abría automáticamente con un extraño simbolo dibujado. A mi derecha se extendían unas escaleras talladas en la piedra del edificio, seguramente se encontrarian ya en desuso. Como siempre Lessiandon se dirigió a Blochi, pero esta vez era diferente, se dirigió muy decidido, con un aire fuerte a ella, sin rozarse, como hasta ahora había hecho.

¡¿Quieres viajar junto a mi?! ¡Por toda la región! Comencemos nuestra propia historia. - le dije a Jen con una mirada muy decisiva.

Cuando porfin llegamos a la puerta del enormísimo edificio un sujeto pelirrojo bastante joven salió de la puerta de cristal. Le acompañaba un Vaporeon de aspecto distinguido y majestuoso, que parecía mantener el porte en cualquier situación. Era una pareja bastante extraña, el aspecto del chico, su sonrisa y su opelo rojo hacían suponer que podía poseer algún Pokémon de fuego, por eso el contraste entre él y su compañero era tan peculiar.

El muchacho de pelo ropjo habló, diorijiendose a Jen y a mí, preguntó lo evidente. Jen no tenía la internción de convertirse en ranger, tal y como dijo, pero...Lessiandon y yo teníamos otro objetivo. Miré a Lessiandon y este me miró a mi, decidido, ionquebrantable, fuerte, tenía un aspecto que de verdad inspiraba confianza, y su mirada era calida, era como si mirase...a un buen amigo...de verdad lo ibamos a ser, esto era solo el comienzo. Cuando Jen se apresuró a contestarle al joven, se acercó mucho, no se porqué eso marcó en mi un momento de tensión, quizas por celos, no lo supe en aquel momento, de todas formas solo respondí a la pregunta del joven, ya contestada por mi compañera.

Sí, deseamos ser ranger, mi deseo es proteger la naturaleza y los pokémon de los estragos humanos, por encima de todo, si esta asquerosa raza solo se hubiese controlado un poco... - dije, extraviandome de la respuesta original desembocando en una expresión exagerada de mis ideales.

Shiel... - dijo mi compañero con la misma expresión que la mía.

Pronto sería ranger, pronto tendría aventuras junto a Jen y Lessiandon, por supuesto, también junto a Blochi, estaba decidido a todo, y Lessiandon también lo parecía, la tenacidad en nuestras miradas podía ser capaz de aguantar los arietes más pesados de todos.

El joven ranger escuchó la respuesta de la joven de largos cabellos, no solo escuchó la respuesta, si no que la sintió, ya que esta joven se acercó mucho al ranger. Entonces pudo escuchar la repuesta del joven apirante real, sus ojos ardúan de entusiasmo al igual que los de su pokémon. La respuesta del joven le dejo anonadado, quizás era un poco radical, pero desde luego tenía el entusiasmo, energía, y tenacidad suficientes como para formar parte de la organización se seguridad natural más grande de todo el mundo. Era raro encontrarse con alguien así, seguramente al jefe le agradaría muchisimo.

Muy bien joven, si es verdad que tanto deseas proteger la naturaleza y los Pokémon...estás en el lugar indicado. Bueno, pero entrar no es facil, no todos lo consiguen, la mayoría...se echan atrás, por desgracia el numero de ranger es mucho menor al de coordinadores o entrenadores. Bueno, me dejo de royos, para convertirte en ranger...tienes que subir esas escaleras, hasta el final. - dijo mostrando una sonrisa mientras señalaba a las enormes y desgastadas escaleras sin protección alguna.

Vaporeon se acercó al Shieldon y lo miró a los ojos, parecía serio, muy serio. Las miradas entre los dos Pokémon se cruzaron, casi saltaban chispas, puede que Vaporeon hubiese considerado a aquel Shieldon de tenaz mirada alguien fuerte digno de rivalidad, esto no era raro en Vaporeon, sin embargo, pocas veces se equivocaba. El ranger se acercó más a su Vaporeon y le acarició la cabeza mientras sonreía con entusiasmo.

Chaval, una cosa antes de que tomes una decisión. Has de saber que si subes por ahí y...bueno, caes, no hará cosa que te salve de esa caída libre, por eso tantos se han echado atrás en esta peligrosa misión, hay posibilidad...de muerte. Sin embargo, si lo intentas, podrás realizar tu sueño, y todos los de este edificio nos senttiremos orgullosos de tí, suerte. - Dijo apoyandole la mano en el hombro.

Escuché detenidamente al joven ranger hablar sobre este equipo. Parecía que no mucha gente se decidía a protgeger la naturaleza y los Pokémon como era debido...de todas formas¿que podía esperarme? Por las experiencias que tube durante mi vida no me sorprendía en nada el hecho, era algo completamente normal en mí. Cuando me señaló cual era la prueba...mis piernas empezaron a temblar levemente, parecía algo realmente duro. Para asegurarme de lo arduo de la prueba miré hacia las escaleras, no podía creerlo...sin protección alguna tendría que subir por alli...

Vaporeon se acercó a Lessiandon, mirandolo con mirada amenazante, y, aunque Lessiandon fuese amistoso también era decidido, tenaz y competitivo, por lo tanto, no se dejó aplastar por aquella mirada llena de reto en su interior y le devolvió la expresión. Lessiandon no iba a ser facil de amedrentar ante esto, aunque él también hubiese escuchado la prueba y entendido a la perfección. Lessiandon dió por supuesto que él también tendría que subir por las escaleras unto a mí, realmente, aunque no lo mostrase demasiado, me tomaba como un gran compañero.

Mis puños apreté cuando pude oir la última advertencia del joven ranger, había...peligro de muerte, no había protección, nadie se encargaría de salvarme si caía, era realmente peligroso, sin embargo no dejaría que eso me llevase al rechazo, no como todos los demás que quisieron y no pudieron, y por supuesto...no estaba dispuesto a morir. Sentí una mano en mi hombro, eso me dió animos, algo de un dexconocido me dió animos, supongo que me inspiraba confianza. Jen comenzó a hablar, se mostraba, segun ella, incapaz de realizar esa prueba para convertirse en ranger, me preguntó si estaba preparado. Sentí una segunda mano en la espalda, era la de mi compañera, Jen, fue cálido y me sobrevino una sensación de gran bienestar, ese fue el detonante para lanzarme hacia aquellas escaleras.

Lessiandon también recibió apoyo de parte de Blochi, no directamente, pero si a través de una mirada. Blochi miró a Lessiandon preocupada, esto fue para Lessiandon lo que para mí fue la mano de Jen en mi espalda, el detonante hacia la acción. Lessiandon se dirigió hacia Blochi, la miró fijamente y le lamió la frente, tras eso, una mirada de decisión fue la despedida hacia el camino que llevaba a las escaleras.

Lo conseguiré, estoy seguro. Jen, lo voy a hacer, y te prometo que después iremos de aventuras, hasta pronto. - Dije dirigiendome hacia las escaleras.

Shiel.. - dijo Lessiandon serio, ese sonido, o "palabra" para ellos, iba claramente dirigida a Blochi para inspirarle confianza. Después de esto Lessiandon me siguió.

Miré a Lessiandon decidido, como acto de confianza, tras esto le dirigí unas ultimas palabras antes de subir.

¿Estás preparado Less?¡Vamos! - dije con animo.

¡Shiel! - contestó él de igual manera.

Tras esto comenzamos a subir aquellas escaleras de piedra desgastadas, apenas tras dar los primeros pasos mis puños se calmaron, ya no temblaba, por entonces era una escalera normal, no demasiado alta, pero no sería así después de unos momentos, estaba claro. El viento empezó a soplar mas fuerte haciendo que tubiese que taparme un poco los ojos con el brazo, Lessiandon giró un poco la cabeza para que no le molestase y seguir andando. Iba a ser una dura subida, la tensión se acumulaba en mis piernas a cada paso que daba.

El viento nos azotaba cada vez más fuerte, no iba a ser tarea sencialla toda esa caminada. Pocos minutos después de empezar a subir, y aprovechando estar en una parte de la montaña que me lo permitiese, miré hacia atrás para poder divisar a Jen, auún tanía un tamaño considerable devido a que la distancia no era demasiado grande, me alegraba que ella me diese ánimos, ya que, por mi parte, el miedo me invadióa cuando me ponía a pensar en un futuro muy próxomo, un futuro en el cual, alomejor mi muerte era inminente.

Lessiandon imitó mi acción, aunque algo me decía que a quien él observaba no era a Jen, si no a Blochi. El pequeño Pokémon se había encariñado mucho con Blochi, estaba seguro de que su amistad duraría muchisimo tiempo. Por alguna razón, Lessiandon parecía mucho más decidido que yo, era algo humillante que algo tan pequeño te superase en valor. Sin embargo mi espiritu competitivo se mantenía hasta con mi pequeño compañero, no iba a permitir que él fuese más valeroso que yo, la idea no me gustaba.

Vamos Lessiandon, a este ritmo tardaremos mucho más. - dije algo serio.

Lessiandon no me contestó, supongo que fue por la tensión, él ya sabía lo que debíamos hacer, también podía reconocer tan claramente como yo la inseguridad de la prueba. Lessiandon y yo seguimos avanzando. Intentaba asentar de la forma más correcta el pie en la escalera, para evitar resbalarme por si aquellas escaleras estaban húmedas al estar justo al lado del mar. Lessiandon por su parte no llevaba este cuidado, parecía igual de decidido que yo, pero también más despreocupado, e intentaba avanzar más rapido que yo, sin embargo le cortaba el paso, no quería que fuese muy rápido, ya que podía sufrir un desafortunado accidente si no llevaba el suficiente cuidado.

Al escuchar el grio de Jen mi ceño se frunció con gran decisión, ella de verdad quería que yo saliese bien de allí. Ella dijo...el primer paso a nuetra gran aventura...eso me llenaba de satisfacción. Aquello hizo que recordase este mismo día por la mañana, era increible el poco tiempo que nos conocíamos y el gran afecto que le había cogido a aquella chica de pelo largo. Debido a esto se me dibujó una sonrisa cada vez estaba mucho más decidido, era seguro que no me iba a dejar vencer facilmente, estaba completamente decidido.

Lel viento era cada vez más fuerte, me golpeaba y hacia que me tambalease, estaba perdiendo los nervios, me ponía muy nervioso, y cuando eso pasaba....no era buena señas. En ese momento escuché un quejido detrás mía, era Lessiandon, parecía que se había golpeado en la pata, eso era algo que le pasaba por intentar adelantarme, pero tenía que hacerle entender que si queríamos salir de esto juntos tendríamos que trabajar como un auténtico equipo, no como dos competidores, como compañeros y no como enemigos.

¡Lessiandon!Escuchame chico, esto es muy peligroso, si queremos salir addelante tenemos que aprender a trabajar como equipo¿ok? Anda ven aquí, así será mejor. - dije mienras cogía a Lessiandon, a "cuscaletas" para que no se hiciese más daño.

Tube que seguir avanzando, el ir atrás no era una opción, Lessiandon pesaba y el viento cada vez era más fuerte, aquel chaval pesaba muchísimo, alrededor de 60 kilos, pero era algo que podía soportart llevar a la espalda, además hacía que el viento no me desequilibrase, era perfecto. El viento era realmente muy molesto, tanto que cada vez más estaba al borde de la rabia del momento. Un poco de polvo se coló en mis ojos, y esto me sacó de quicio.

¡MALDITO VIENTO NO ME VAS A VENCER, QUE TE QUEDE CLARO!¡¡¡¡VROOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOE!!!! - dije fuertemente mientras subía con la mayor velocidad posible, mucha rabia y energía contenida, y recientemente liberada.

¡¡¡¡SHIEEEEEEEEEEL!!! - parecía que le había transmitidfo la msma energía que yo acumulaba a Lessiandon por su manera de gritar.

Esto sucedió cuando estaba en la parte trasera del efdificio, por lo que supongo que Jen no me vió decir eso, aunque poco después vería como corría mientras subía las escaleras a toda velocidad mientras llevaba en mi espalda a Lessiandon. Estaba en modo de trance, ese estado en el que uno se deja llevar por sus instintos y no por su mente, un estado de rabia en el que las cualidades físicas no estaba regidas por el cerebro, sino por el instinto.

Mi recorrido se producia exitosamente a toda marcha en el ascenso de las escaleras de aquel gran edificio. Me sentía vivo, activo, verdderamente estaba vivo, lleno de fuego en mi interior, lleno de ese entusiasmo tan ardiente como las más grandes llamas del Pokémon más caliente de todo el mundo. Las gotas me mojaban la cara, era impresionante como incluso las gotas que estaban mucho más abajo mía pudiesen llegar ahasta ese punto por causa del viento, pero hacía que por mi cuerpo fluyese una sensación refrescante y completamente revitalizante. Por último estaba el viento que me golpeaba, mi gran enemigo en aquel momento, el primer gran obstáculo en mi aventura, el viento. Sin embargo Lessiandon y yo hacíamos un gran equipo, él, como un fiel escudo acompañante, me proporcionaba la estabilidad necesaria para seguir por allí sin siquiera pegar un resbalón.

Mientras ascendiamos por esas grandes escaleras el latir de mi corazón se aceleraba cda vez más, y por más que subía, a causa de la adrenalibna, el cansancio se iba haciendo más y más leve, El dolor en mis piernas por el esfuerzo se calmaba cuanto más las forzaba, y mi sonrisa se acentuaba a cada escal´pn que subía. Por su parte Lessiandon se encontraba como yo. Él se sentía completamente compenetrado conmigo en aquella ardua misión, me tratyaba como a un compañero, como a una ayuda, y sobre todo, como a un gran amigo. Estaba seguro que la sincroniización entre el y yo era de sobresaliente, ambos portabamos el mismo ceño fruncido y la misma sonrisa descompensada.

¡DON! - escuché aceleradamente a modo de alerta.

Lessiandon consiguió diviasar algo enmedio del camino, era una pequeña roca que nos bloqueaba el paso. Si hubiese hecho aquella misión solo...no lo hubiese conseguido, ni Lessiandon ni yo hubiesemos conseguido el objetivo final solos. Lessiandon se abría cansado antes de la mitad de la subida, quedandose allí atascado por muchísimo tiempo, y yo me hubiese precipitado hacia el mar en una caída mortal si no fuese por su peso que tanta seguridad me proporcionaba sin contar su reciente aviso de peligro. Devido al pequeño tamaño de la roca pude sortearla sin dificultad, un pequeño salto a pies juntos sin dejar de lado la marcha furiosa y vivaz que recorría a lo largo de las enormes escaleras.

¡GRACIAS LESS!¡TE DEBO UNA!¡¡VROOOOOOOOOOE!!! - grité con gran agradecimiento.

No sabía cuando faltaría para mi llegada a la puerta final, pero estaba seguro de que nos iría bien en aquella escalada, llegariamos seguros, éramos un equipo imparable. Mi instinto proporcionaba los pasos más seguros hacia la subida, mi resistencia nos impulsaba a mi y a Lessiandon hacia la cima, mi rabia nos proporcionaba la veozidad, su alerta nuestra seguridad y su peso nuestra estabilidad. La compenetración no podía ser mejor. Lessiandon era mi escudo, yo, las potentes manos que lo blandían.

Seguí corriendo, lo más veloz que podía con Lessiandon a mi espalda, porfin podía notar mis gotas de surdor chorreando por todo mi cuerpo, y con ellas, el molesto picor que las acompañaba, era una sensación que de verdad odiaba, pero la magnífica sensación de la adrenalina que circulaba con mis superaba ccon creces a la molestia del picor. Los pasos eran cada vez más pesados, más ruidosos, mi grito, aunque se acentuaba, también se cansaba más, al tener que respirar levemente por mi boca. Aquella no estaba resultando una prueba sencilla, si yo no tubiese aquella tendencia a enfurecerme con los enemigos, y tampoco hubiese contado con Lessiandon, aquella prueba hubiese resultado del todo fallida.

El viento mecía mi espesa melena, los cordones de mis botas se desataban poco a poco, y mis piernas habían perdido completamente la sensibilidad, si seguíamos así mucho tiempo tendríamos que tomar un pequeño descanso. Lessiandon depositaba mucha confianza en mí, en aquel momento dependía completamente de mi persona, él sabía que si yo quería podía dejarlo caer por aquel precipicio en cualquier momento, sin embargo la seguridad la tenía en que yo no realizaría aquella despiadada acción.

¡Shiel!¡Don!¡Shiel!¡Don!¡Shiel!... - Lessiandon me marcaba el paso con aquella aguda voz, pero llena de energía.

¡¡¡¡¡VROOOOOOOOOOOOOOOoooooeeee.... - dije mientras toda mi fueria se perdía poco a poco.

Decidí sentarme, ya no sabía ni por que tramo de la escalera iba, de pronto me paré en seco y cruzé las piernas. Cerré los ojos y respiré hondo, el cnsancio había llegado a mí, podría haber seguido, sin embargo no era bueno si no quería desequilibrarme y caer por el precipicio. Al cerrar los ojos Lessiandon se bajó de mi espalda. Yo sentí gran alivio, un gran descanso. Con mis ojos cerrados la brisa que sentía se potenciaba, reponiendome el aliento que me faltaba, me sentía genial, por mí corría esa sensación que surgía después del esfuerzo físico. Pero una extrña sensación me recorría el cuerpo, el viento no me golpeaba por delante. Decidí abrir los ojos para saber que era lo que lo impedía.

Una gran puerta de cristal autmatizada se abría a la vez que mis ojos, una gran puerta frente a mí. Lessiandon nos dedicaba unas palabras de felicitaciones, o eso al menos fue lo que entendí por su tono de voz. Allí estabamos, habíamos llegado al final del todo, por fin habíamos logrado nuestro objetivo.