Andando hacia Firterra

Después de salir de la tienda pokemon, nos marchamos de la ciudad. Doble T, yo, y los dos nuevos pokemon. Apenas habíamos comenzado a caminar por la Ruta 1 cuando abordé un tema que me interesaba.

— Creo que voy a liberarlo —pensé, en voz alta—. No para luchar: quiero conocer a Kibou y... y...

"Y hacernos amigos" era una frase demasiado cursi, aunque no se me ocurría como expresar mis intenciones sin no tener que recurrir a ella. ¿Ver como nos relacionábamos? ¿Empezar a ser una coordinadora pokemon? Como no sabía bien como expresarme, preferí no terminarla.

En realidad, no se lo había dicho a Doble T para que me diera su consentimiento, simplemente para contarle lo que pretendía hacer. Quizá él también estaba deseando conocer a su pokemon, liberarlo, aunque no fuera para luchar.

En cualquier caso, nada más contárselo, apreté el botón de la pokeball y esperé a que se liberara.

Agarre nuevamente mi pokeball... La verdad no habia pensado en liberar a Piplup hasta el primer combate... No queria que se mal acostumbrara. Pero quiza fuese una buena idea... Si iba a ser un pokemon complicado, mejor descubrirlo antes de quedar en ridiculo.

- Creo... Que yo tambien lo hare... - Dije un tanto serio.

Kibou... En ese momento se me paso por la cabeza el nombre del Ralts de Leinth... Piplup... La verdad nunca habia sido bueno para los nombres. ¿Deberia elegir uno para Piplup?... ¿Y si no le agradaba el nombre?... La verdad me agrada mi nombre, mis padres eligieron bien poniendome Taku... Pero Doble T siempre me gusto mas... Y eso es algo que yo mismo elegi.

Saque la pokeball y la abri en mi mano, soltando a Piplup delante de nuestro. Un rayo blanco salia y tomaba forma de pokemon rapidamente... Por fin conoceriamos a nuestros dos nuevos compañeros.

Apreté el botón de la pokeball y, de él, salió mi primer pokemon, Ralts, aunque ya lo había bautizado como Kibou, me recordé que debía enseñarle su nombre, o podría confundirse. Era un pokemon pequeño, mono para algunos, asquerosos para otros. A mí, simplemente me gustaba, pero ese favoritismo iba mucho más allá del aspecto físico.

— Kibou... —susurré, sujetando a Ralts entre mis brazos.

Aunque nos habíamos detenido, prefería tenerlo sujeto cerca de mí, sobre todo en aquel primer encuentro.

—. Hola —saludé, un poco cortada. ¿Qué debía hacer? ¿Y decir? ¿Qué estaría pensando? Me miraba intrigado, ¿o quizá curioso por mi reacción?—. Mi nombre es Leinth. El tuyo, Kibou. ¿Te gusta? Si no es así... te lo puedo cambiar. Podemos escoger un mote que también te agrade a ti...

Como única respuesta, Kibou emitió un dulce gruñido. Incluso sin saber hablar, entendí que todo le parecía perfecto.

Me sorprendio el comportamiento de Leinth... Creo que habia hablado mas con aquel pokemon en 1 minuto que conmigo en todo el dia... Y sin duda, con muchisima mas soltura. Quiza por el hecho de que los pokemons nos aceptan como somos y siempre suelen comprender a sus entrenadores... O en este caso a su coordinadora.

Pero mientras Leinth protagonizaba una primer encuentro con Kibou, yo tenia el mio propio con Piplup.

La verdad me sorprendi bastante. Piplup era un pokemon un tanto distinto a lo que me esperaba, no era un simple pokemon pequeño y adorable... Ante mi tenia un pokemon algo mas grande de lo que me esperaba... Quiza el destino quiso que mi primer pokemon fuese como yo, o quizas fuese una simple coincidencia. Mostraba una pose recta y orgullasa, con la cabeza alta y los brazo (o mejor dicho las alas) cruzadas, y una mirada seria.

- Encantado... - ¿Que podia decir...?

No era mucho mas hablador con alguien que podia esperar una conversacion y no iba a serlo con el pokemon... Mire a Leinth mientras negociaba un nombre con su Ralts... Yo no tenia nada pensado. La verdad la escena era curiosa, porque Piplup tambien se quedo mirando a Ralts y su coordinadora, y cuando volvi la mirada a mi pokemon el me la devolvio...

- Yo... No tengo un nombre para ti... - Le dije mientras me analizaba. - Pero ya encontraremos uno si quieres...

La verdad parecia un tipo duro... Y bastante fuerte. A mi parecer tenia todas las papeletas para ser un gran pokemon, solo esperaba que no se escapase de mi control.

Le estreche la mano, simplemente para mostrarle mis respetos... Tuve que agacharme y ponerme en cunclillas. Se mostraba receloso... Y no muy amigable... Pero finalmente acepto devolverme el saludo.

- Pip... Lup... - Abrio el pico por primera vez. Sonaba tan serio y misterioso como podria resultar yo... La situacion me parecia un tanto rara.

Me levante nuevamente mirando al horizonte... La Ruta 1 parecia larga, pero seguro que Piplup podria aguantar. Piplup adopto la misma posicion que yo, erguido y mirando a la ruta. La verdad me resultaba bastante gracioso.

- Creo que es el momento... - Mire a Leinth por encima del hombro mientras hablaba con Ralts - ¿Vamos...?

Di mi primer paso lentamente, esperando a Leinth... Piplup me seguia a paso firme. Ya no habia marcha atras.

Doble T también liberó a su pokemon, Piplup. Parecía un pajarito azul, seguramente la envidia de toda chica "normal", pero al mismo tiempo, el Piplup de Doble T destacaba por sus gestos, su propia dureza... En cierto modo, era la viva imagen de Doble T. Callado, imponente y preparado.

Al parecer, Doble T no tenía ningún nombre pensado para su pokemon. El nombre era lo de menos, lo importante es que, ya fuera Piplup o un mote, lo utilizara su dueño.

Deposité a Kibou en el suelo, para que fuera al lado de Piplup. Si no aguantaba el camino, volvería a cogerle en brazos, aunque le vendría bien empezar a hacer ejercicio. Por el contrario, me situé al lado de Doble T.

— Estamos listos —le aseguré, hablando por los dos.

La verdad no me gustaba demasiado la idea de que Piplup fuese fuera de la pokeball... Podria perderse o escaparse, esas cosas pasan, pero si Leinth dejaba libre a Kibou quiza fuese mejor que yo dejara tambien a Piplup tomar un poco el aire... Eso si, que no se mal acostumbrase.

La Ruta 1 parecia un lugar tranquilo, con grandes montañas alrededor y unas buenas vistas... Podian verse algunos arboles y hiervas en las que seguro que algun pokemon aguardaba...

Caminabamos los cuatro juntos tranquilamente, y la verdad iba bastante distraido mirando a los alrededores... No es que yo fuese de los que queria cazar a todos los pokemons del mundo, pero no queria perder la ocasion de encontrar alguno interesante.

- ¿Sabes a donde lleva este camino? - Pregunte a mi compañera.

La verdad no habia sido nada precavido respecto a esto... Ni un misero mapa me habia traido. La verdad no se me ocurrio comprarlo cuando estuvimos en la tienda... ¿Habra un gimnasio en la siguiente ciudad?... No habia participado ni en mi primer combate, y ya estaba pensando en gumnasios... Castillos en el aire dicen que se llama...

Andamos en silencio por el camino, los cuatro juntos. Veía a Kibou disfrutar con cada nueva vista, mirando a todas partes, preocupado por perderse alguna curiosidad interesante. Sin embargo, en vez de ir de un lado a otro comprobándolo todo, mantenía su ritmo, girando simplemente la cabecita. En cierto modo, era como yo. Silencioso y curioso.

Negué con la cabeza ante la pregunta de Taku. Al parecer, ambos tendríamos que caminar hacia la deriva.

— El mapa que miramos era sólo de Provento. No he visto ninguno más.

Quizá nos habíamos precipitado algo: el sol brillaba y aún quedaba mucho hasta el anochecer. Aunque sin saber con precisión cuánto quedaba para llegar, cualquier cosa podía pasar...

Llegamos a una zona de muchos árboles y alta hierba. Con su color verde, a veces Kibou se volvía irreconocible por la hierba, aunque le localizaba enseguida cuando levantaba la cabeza y abría bien los ojos. Cualquiera diría que era un pokemon de tipo Planta aunque, por suerte, no era así. No me gustaban mucho los pokemon Planta.

La verdad me intrigaba que era lo que hacia que se moviese aquel arbol... ¿Seria un pokemon? Mi padre... Siempre decia... Que los mejores pokemons eran los mas dificiles de capturar... ¿Como podia averiguar que pokemon era...? La verdad yo no tenia intencion de subir... El pokemon no creo que bajase y Piplup no lo veia muy habil para subir.

- Espera un segundo Leinth... - Dije mientras acariciaba el pequeño arbolito con una mano... - Piplup... Destructor...

La verdad Piplup no parecia estar por la labor... Estaba plantado al lado de Kibou y mirandome firmemente... Parecia pensativo... Pero finalmente accedio, lentamente se acerco hasta el arbol y cargo su brazo para atacar el arbol. A ver si asi el pokemon caia...

Me aleje un par de metros, para que no cayese encima mio...

- Espero no llevarme una decepcion... - Dije susurrando.

En ese momento Piplup asesto un duro golpe al arbol... El arbolito se tambaleo un poco... ¿Caeria el pokemon...?¿O bajaria enfadado? Solo esperaba que apareciese algo...

Doble T se fijó en un árbol en particular que, de vez en cuando, se movía, como si hubiese algo arriba que lo balanceara. No le presté mucha atención, pero a él debía de despertarle mucho más que seguridad. Ordenó a Piplup que lo golpeara y, aunque no muy por la labor, el pokemon acabó obedeciendo.

De la copa del árbol, cayó un pokemon con forma de mono. Mankey. Estaba furioso y lo primero que hizo fue fijarse en Piplup. No era necesario ser muy inteligente para saber lo que venía a continuación. Kibou y yo nos apartamos, dispuestos a ser los espectadores del combate pokemon.

— Buena suerte —susurré a Doble T, antes de apartarme de lo que sería el campo de batalla.

Esperaba que Doble T y Piplup formaran un buen equipo y pudieran con Mankey solitos. Sino... No, no me gustaría ser la suplente.

¿Un mankey?... La verdad creo que me sorprendio... En Kanto tambien los habia correteando por todos lados... Es mas, mi padre tenia un Primape... Pero pese a la sorpresa, me senti algo decepcionado. Piplup... Ralts... Eran pokemons completamente nuevos... ¿Pero mankey? No estaba seguro de querer uno en mi equipo.

- Gracias Leinth... - Dije mirando por encima del hombro Vamos... Levanta Piplup... - El mankey le asesto un duro golpe... - Puedes ganar...

Saque mi pokedex... Pese a ser un pokemon que conocia, preferia saber lo que la pokedex podia ofrecerme... La informacion es poder. Y conocer a tu rival es una gran informacion.

- Piplup... Destructor...- Era mi primer combate y no estaba seguro como debia afrontarlo... - Y... Destructor otra vez...

Ataque, ataque, ataque... La verdad tampoco sabia que ataques conocia Piplup... Y no queria dar descanso a mankey...

- Aqui acaba esto...- Dije mientras metia mi mano en un bolsillo. Saque una pequeña pokeball que al presionar su boton central aumento de tamaño... - Vamos alla...- Lance la pokeball con fuerza contra el mankey. Seria mi primera captura...

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Taku HA OBTENIDO:

Mankey

HA PERDIDO:

Pokéball

TU PC SERÁ ACTUALIZADO.

Una vez vi acabar el combate con la captura del pokemon, me acerqué a Doble T. Había sido breve, bastante breve. Aunque, contando que acabábamos de empezar y aquel Mankey no era un pokemon muy fuerte, ni mucho menos entrenado, el equipo entre Doble T y Piplup había conseguido superar el reto sin problemas.

— Enhorabuena —dije secamente, dando un solo aplauso. Porque... ¿eso era lo que hacía la gente para felicitar a otra persona, no?

Observé la pokeball del suelo. No me gustaban las peleas sin sentido entre pokemon, pero aquella era necesaria. Mankey también había participado por su propia voluntad, así que no había nada injusto en aquella batalla. Además, al escoger ser coordinadora, también acepté que tendría que pelear contra otros pokemon para mejorar, ya que Kibou y yo no podríamos solos contra todos los contrincantes.

Pero seguiría sin gustarme. Nunca.

— ¿Continuamos? —Pregunté. No estaba impaciente, pero quería saber si Doble T quería hacer algún alto para liberar a Mankey o para que Piplup descansara. Ambas opciones me daban igual, así que la decisión quedaba en sus manos.

¿Ya estaba? Bueno la verdad fue... Sencillo, mi padre siempre decia que conseguir buenos pokemons era duro... ¿Eso significaba qu mankey no era un buen pokemon? No habia sido ta interesante como los combates que disputaba el en el gimnasio, pero habia tenido un buen final. Me agache para recoger mi "premio".

Leinth me felicito brevemente y con un simple aplauso un tanto seco ¿tan decepcionante habia sido?¿Sentiria verguenza ajena?¿O simplemente significaba que Leinth era asi? Preferi no pensarlo, por el momento Leinth me habia demostrado ser una buena chica... Un tanto seria... Pero yo no estaba para quejarme.

- Bien... Podemos proseguir, no quiero que anochezca... - Dije ingenuo de mi sin saber como de larga iba a ser la ruta.

Cuando empece a caminar, pude ver como Piplup, pese a sus esfuerzos por permanecer firme y no demostrar debilidad, le costaba caminar... Estaba cansado...

- Vamos... Vuelve. - Dije mientras sujetaba la pokeball y un rayo rojo metia a Piplup dentro.

Mire a Leinth ya podiamo proseguir... Se me paso por la cabeza la idea de volver al centro pokemon... Pero con Mankey y Piplup, y un poco de descanso, ademas de Leinth y Kibou creo que podiamos seguir sin peligro.